sábado, 14 de abril de 2007

Latinoamérica ya resiente el calentamiento global

En el Caribe han muerto aproximadamente un tercio de los arrecifes de coral en los sitios oficiales de monitoreo debido a un incremento en la temperatura del mar


Associated Press

Sábado, 14 de Abril de 2007
Distrito Federal-- El deshielo de glaciares, la desaparición de especies y otras consecuencias del calentamiento global no son fenómenos del futuro en Latinoamérica sino que ya están ocurriendo.
Un organismo de las Naciones Unidas advirtió esta semana sobre el nefasto impacto que el fenómeno tendrá en la región a largo plazo. Sin embargo, el deterioro de los ecosistemas ya es una realidad palpable.
El glaciar Chacaltaya en Bolivia se ha dividido en dos y los científicos advierten que desaparecerá en siete u ocho años. También están retrocediendo los glaciares de la Patagonia, los peruanos de Yanamarey, de la Cordillera Blanca y de Santa Rosa, así como el glaciar del volcán nevado de Santa Isabel en Colombia, según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
En Costa Rica, algunos anfibios como el sapo dorado y la rana arlequín han desaparecido y un estudio publicado por la revista Nature revela que ya no es posible detectar dos tercios de las 110 especies conocidas de ranas arlequín en Centro y Sudamérica. En Puerto Rico, el biólogo Rafael Joglar y su esposa Patricia Burrowes, ambos de la Universidad de Puerto Rico, hallaron que algunas poblaciones de ranas del género Eleutherodactylus estaban ausentes. En esta isla y en otras cercanas, los expertos creen que tres de 17 especies de ranas de este género están extintas y siete u ocho están en retroceso, mientras que en Argentina ha habido fuertes variaciones climáticas.
“Todo el territorio de la Argentina hoy tiene un nivel de precipitaciones de entre 30 y 40 por ciento superior al promedio histórico. La zona Centro y Noreste del país sufre un incremento en la frecuencia de tormentas severas. Ambos fenómenos han sido asociados al cambio climático'', señaló Juan Carlos Villalonga, director político de Greenpeace en ese país, a The Associated Press.
En el Caribe han muerto aproximadamente un tercio de los arrecifes de coral en los sitios oficiales de monitoreo debido a un incremento en la temperatura del mar y en el 2004 se registró en Brasil el ciclón extratropical Catarina, que algunos llamaron el primer huracán del Atlántico Sur.
El Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), de la ONU --integrado por unos 2,000 científicos--, indicó que el fenómeno está siendo provocado por la acumulación en la atmósfera de dióxido de carbono y otros gases que retienen el calor, consecuencia del consumo de combustibles fósiles y de otras actividades humanas.
Un documento presentado recientemente por el IPCC advierte que en sólo algunas décadas el calentamiento global provocará grave escasez de agua, inundaciones y diseminación de enfermedades tropicales que afectarán a millones de personas, así como extinción masiva de especies. El Amazonas y los glaciares latinoamericanos podrían desaparecer.
En el Protocolo de Kioto --el cual busca hacer frente al problema estableciendo cuotas de reducción de gases por país--, se reconoce que las naciones industrializadas, con el 20 por ciento de la población mundial, son responsables de más del 60 por ciento de las emisiones actuales y prácticamente de la totalidad de las emisiones históricas de estos gases.
La contribución latinoamericana a las emisiones globales era de sólo el 7 por ciento en el 2000 y se espera que para el 2050 genere el 9 por ciento, según un informe sobre el cambio climático en la región, elaborado en marzo del 2006 a iniciativa de México y de la oficina regional para América Latina y el Caribe del PNUMA.
“Nos preocupa mucho el problema. Aunque hagamos las cosas bien (se reforeste y se reduzcan las emisiones de gases), mientras los grandes emisores --Estados Unidos, Europa y China--, no reduzcan sus niveles actuales, nos condenan a los chicos a morir'', declaró Carlos León, director de la Fundación Neotrópica --una organización ambientalista costarricense--, en un correo electrónico enviado a la AP.
Ante este panorama, desde hace varios años los gobiernos latinoamericanos han desarrollado diversas estrategias para mitigar el problema.
Brasil ha hecho importantes avances en el desarrollo de energías renovables y actualmente ocho de cada 10 automóviles en el país pueden funcionar con etanol. Además, desarrolló modelos regionales de posibles escenarios y cuenta con importantes hidroeléctricas, así como proyectos de energía solar y eólica. También usa el bagazo de caña de azúcar para generar electricidad.
En México se establecieron programas de ahorro energético, uno de los cuales logró ahorros anuales de 500 gigavatios-hora; Petróleos Mexicanos introdujo un programa de ahorro de energía que permitió disminuir sus emisiones en casi 11 millones de toneladas de carbono anuales y se creó el Fondo Mexicano de Carbono, que busca detectar y promover actividades para la disminución de gases, entre otras estrategias.
En Uruguay se tomaron medidas para incrementar la capacidad de los suelos para capturar carbono; Chile impulsó proyectos de Mecanismo de Desarrollo Limpio, parte del Protocolo de Kioto; Argentina elaboró informes sobre las emisiones y las vulnerabilidades del país, y ha efectuado avances en el desarrollo de fuentes de energía renovable.
Por otro lado, Honduras asignó 1 por ciento del presupuesto nacional a un programa de reforestación y desarrolló programas de eficiencia energética; Venezuela cambió 34 millones de focos por otros de bajo consumo y en Colombia se desarrolló el sistema de transporte Transmilenio, con autobuses que utilizan gas natural y diesel, entre muchas otras medidas aplicadas por diversos países de la región.
Sin embargo, parece que lo realizado aún es insuficiente, y enormes sectores de la población continúan sin modificar hábitos contaminantes.
“No tenemos planes a mediano y largo plazo ajustables en América Latina. Los gobiernos miran para otro lado'', remarcó el meteorólogo argentino Osvaldo Canziani, copresidente de un Grupo de Trabajo del IPCC. “Lo más grave no es la disponibilidad de dinero, es la falta de decisión política que permita la continuidad de proyectos de adaptación y mitigación''.
La concientización y participación de los habitantes es crucial. El cambio climático es un problema generado colectivamente y se requiere un esfuerzo masivo para enfrentarlo. ¿Cómo pueden participar los ciudadanos? Reduciendo el consumo de combustibles fósiles, usando menos agua y electricidad, y contribuyendo a la reforestación.
Aunque Latinoamérica aporta sólo un pequeño porcentaje de las emisiones globales, sus extensos bosques y selvas desempeñan un papel fundamental en la mitigación del fenómeno, pues actúan como “sumideros'' de carbono, esto es, por medio de la fotosíntesis fijan el dióxido de carbono y emiten oxígeno. Y, al destruirlos, se liberan grandes cantidades de carbono a la atmósfera. Así, es crucial su conservación.
“El problema es de educación. En escuelas públicas, los profesores muchas veces ni saben lo que es fotosíntesis'', declaró a la AP el doctor José Marengo, de 48 años, coordinador de estudios de cambio climático del Instituto Nacional de Investigaciones Especiales, de Brasil.
Para la doctora Cecilia Conde, de 53 años e investigadora del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la Universidad Nacional Autónoma de México, “hay un consenso mundial de que ya estamos dentro de un proceso y se va a agudizar. El problema es movilizar a la gente para tomar acciones, porque se nos puede acabar el tiempo. Podemos llegar a condiciones irreversibles, y sería como si hubiéramos cambiado de planeta''.

1 comentario:

Anónimo dijo...

yo soy una joven de la ciudad de trujillo (perú) y también creo q aún en mi país y en otros de sudamérica no se le da la debida importancia , no hay conciencia por parte de la población para que ésta cuide el lugar donde vive,los medios de comunicación muchas veces no se cansan de emitir programas sin sentido, q no ayudan en nada al cambio de nuestra sociedad,sociedad muchas veces plagada de promesas incumplidas por cada temporada de gobierno;acostumbradas al desamparo del estado , a la escasez de servicios básicos,al olvido,entre otros problemas q son muchos y variados.por ello creo q muchas veces una sociedad q carece de tantas necesidades , hasta un problema tan importante como el calentamiento globlal pude parecerle irrelevante.
Dedico este corto poema a aquellos q también sienten tristeza y rencor al ver destruir a su propio planeta por las manos inconcientes del mismo hombre :

Cuando quede sólo barro q tomar
ahí estaremos nosotros excavando pozos secos
cuando hayan hojas secas muertas de sed
ahí estaremos nosotros; con el deseo de posar un árbol en el cemento ignorante cultivado
cuando ya no podamos salir ni un centrímetro descubiertos
ahí estaremos nosotros hartos de esa luz, q naranja se ha vuelto
por la inconciencia de aquellos y estos tiempos.
M.G